Amo y siervo es una párabola sobre el autoconocimiento y las infinitas posibillidades que cada uno de nosotros encierra en su mundo interior para encontrar en la interacción el éxito extendido como felicidad y autorrealización. Es una metáfora con lecciones y aprendizajes pensados para servir en ese otro ámbito aventurero del emprendiemiento y la empresa, pero que funciona para vida misma en toda su extensión.